En Cataluña coexisten todo tipo de paisajes: Costas y playas de arena fina y acantilados y calas inaccesibles por lo agreste del territorio; zonas del interior de grandes atractivos y lugares con encanto. Pero sus montañas guardan secretos que merece la pena descubrir. Vamos a encontrar 7 sitios que ver en el Pirineo Catalán.
Vielha
Es la capital del Valle de Arán, que se encuentra en Lérida. Es un pueblo de gran tránsito en invierno debido a su cercanía con algunas de las mejores estaciones de esquí de Europa.
En verano se pueden hacer cantidad de actividades por sus alrededores, como circuitos en bicicleta de montaña, senderismo y otras que dejan impresionado.
En el mismo pueblo sus casas de piedra y madera, la Iglesia de Sant Miquel, el museo etnológico y otros edificios medievales hacen del conjunto algo único.
Es de necesidad visitar el centro histórico de la villa, también ver el Río Nere que divide en dos partes el pueblo aportando belleza al paisaje urbano, dándole un aire típico de montaña.
Parc Nacional D’Aigüestortes y Estany Sant Maurici
Este parque nacional tiene más de 200 lagos, entre los cuales destaca el Estany de Sant Maurici, que se pueden visitar a través de las rutas existentes.
Aquí podemos encontrar cimas de más de 3000 metros de altitud, junto a ríos y cascadas de gran pureza.
Es un espacio natural protegido con animales y vegetación de excepción, algunas de cuyas especies son autóctonas.
Hay actividades como rutas con guías, senderismo, raquetas de nieve, exposiciones y charlas para concienciar al público de cómo proteger y conservar un espacio natural privilegiado.
Pedraforca
Está en los pre-pirineos catalanes, en la Sierra del Cadí, dentro del Parc Natural del Cadí-Moixeró. Es fácil de identificar por su forma acabada en dos picos: El Pollegó Superior de 2506 m y el Pollegó Inferior de 2445.
Es un lugar excepcional para escalar y hacer excursiones familiares. En el Parque de Pedraforca conviven muchas especies de animales y plantas.
Los recorridos que se pueden hacer son espectaculares y los hay de distintas dificultades y distancias para poder elegir si se es un experto o se prefiere más bien un paseo familiar.
La ascensión a la montaña se realiza por las rutas ya establecidas, pero es preciso no padecer de vértigo, aunque no es complicada. Los alpinistas suelen trepar a las cimas por la cara norte.
Vall de Núria
Está situado a 2000 m de altura en el Pirineo catalán, rodeado de cimas en las que nacen varios ríos. Se pueden realizar muchos deportes de aventura en invierno y verano, como el esquí, barranquismo, kayaks, etc.
Aquí la presencia religiosa tiene gran influencia y nos encontramos con el Santuario de Nuria en un glaciar a 2000 m de altitud. Es un lugar de peregrinaje en el que se puede hacer retiro espiritual y meditación
Las actividades van desde el tiro con arco a paseos en pony, junto con circuitos para orientarse y diversos talleres que hacen del lugar una zona perfecta para ir en familia.
Una de las mayores atracciones del valle es su tren de cremallera que salva un desnivel de 1000 m a lo largo de 12 km.
La montaña principal del Val de Núria es el Puigmal con 2900 m. con una cima desde la cual se domina un gran paisaje al norte, sur, este y oeste.
Prullans, el mirador de la Cerdaña
Se encuentra en la Baixa Cerdanya rodeado de formidables montañas en las que los animales salvajes se mueven con total libertad.
Prullans conserva el encanto de ser un pueblo típico del Pirineo con sus tradiciones que vienen desde hace muchos siglos.
Allí se encuentra el Mirador de la Cerdanya desde el que se pueden ver toda la Comarca y el espectacular Parque Natural del Cadí-Moixeró.
Muy cerca del pueblo encontramos dólmenes, concretamente en Oren y Las Coves d’Anes lo que indica que este paraje tuvo presencia humana a lo largo de toda la historia.
Santuario de Montgarrí
Situado en el Valle de Arán, cerca de Baqueira-Beret es un lugar ideal para hacer senderismo y pasear. El santuario pertenece al pueblo de Naut Aran.
En él encontramos enormes prados en los que viven vacas y caballos, así como bosques, el río Noguera Pallaresa...y la tranquilidad, mucha.
Se permiten los baños en el río y es un lugar encantador para hacer un pic-nic cerca del mismo.
Para llegar a este lugar existe una ruta que comienza en Pla de Beret con un desnivel de 250 m al ir y que hay que remontar a la vuelta, de todas formas, no es un recorrido complicado.
Hay una senda peatonal y otra para vehículos que quieran acceder al lugar, aunque en este último caso lo mejor es llegar en un todoterreno.
Este Santuario se fundó en el siglo XII, aunque el actual edificio es del siglo XVI a una altitud de 1850 m. Al lado del mismo existe un refugio muy utilizado en invierno preferentemente.
Fonts de Llobregat
Se encuentran en Castellar de N’Hug, uno de los más bonitos pueblos del Pirineo Catalán, en el nacimiento del río Llobregat a 100 m de altura.
Su mayor atractivo es ver la cuna del río en un entorno natural entre cascadas de agua y una frondosa vegetación que atrapa al caminante que descubre este lugar.
Llegar a les Fonts de Llobregat es una excursión fácil que se puede realizar en familia de forma agradable. El río Llobregat nace de las rocas y es uno de los más importantes de Cataluña.
El pueblo de Castellar de N’hug tiene una belleza espectacular que bien merece una visita, sobre todo estando en la zona, con una iglesia medieval y el Museo del Pastor.
Mención aparte merecen sus embutidos elaborados a la manera tradicional. Están exquisitos.
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